Explora la versatilidad del cárdigan, una prenda clásica que se adapta a los cambios en las tendencias y estilos de la moda masculina.
La moda masculina sigue evolucionando, y una prenda que continúa adaptándose a las tendencias cambiantes es el cárdigan. En un artículo reciente, “The Fashionisto” explora la versatilidad de este clásico de la vestimenta masculina, que va desde una simple capa de abrigo hasta una declaración de estilo audaz.
Originario de la vestimenta escolar de élite, el cárdigan ha atravesado décadas de reinvención. En los años 90, se popularizó gracias a iconos como Kurt Cobain, quien lo utilizaba en un estilo oversized. Hoy en día, el cárdigan se reinterpreta a través de estilos de streetwear y mínimas elegancias, convirtiéndose en un básico en los armarios contemporáneos.
Existen diversas formas de estilizar un cárdigan, todas resaltando su adaptabilidad. Uno de los looks más sencillos consiste en combinar un cárdigan con una camiseta básica blanca; esto se puede complementar con jeans de mezclilla o chinos ecru, terminando el conjunto con deportivas o mocasines de ante. El autor del artículo destaca que “un cárdigan con textura en tonos camel u oliva añade interés sin sobrecargar el look”.
Otra opción es utilizar un cárdigan y un suéter a juego, lo que permite un estilo más uniforme sin perder personalidad. Optar por un suéter de cuello redondo ribeteado bajo el cárdigan mantiene la textura consistente, mientras que un par de jeans oscuros añade un contraste efectivo.
Cuando las temperaturas bajan, un cárdigan de cierre completo puede sustituir a una chaqueta. Al combinarlo con una camisa de mezclilla y una camiseta blanca, se obtiene un estilo que es tanto utilitario como elegante. Para completar el look, los sombreros y las botas son una excelente elección.
Para la época más cálida, un cárdigan puede funcionar perfectamente con una camiseta sin mangas. Al mezclar tonos pastel con elementos del streetwear, un cárdigan rosa claro con una camiseta blanca y pantalones cortos de mezclilla, se obtiene un estilo relajado y de vanguardia.
Además, incorporar una camiseta polo debajo del cárdigan eleva el conjunto a un nivel más refinado. Una paleta de burgundy combinada con pantalones negros plisados ofrece una apariencia más pulida, convirtiéndose en una opción intermedia perfecta entre lo casual y lo formal.
El estilo también se puede experimentar combinando el cárdigan con una camiseta gráfica. Este look evoca una actitud despreocupada que recuerda a la estética ‘90s, combinando un cárdigan negro oversized con una camiseta artística y pantalones en tonos burdeos.
Finalmente, se sugiere que un cárdigan con un shirt de vestir y una corbata puede aportar un toque formal a un conjunto de negocios. La clave está en elegir un cárdigan de tejido denso o con cuellos definidos, que se puede combinar con pantalones a medida, ofreciendo un aire moderno y sofisticado.
El cárdigan ha demostrado ser mucho más que una prenda nostálgica. Ya sea en capas relajadas para primavera o en construcciones más rígidas para el frío, este clásico se adapta rapidamente, manteniendo su capacidad de reinventarse constante en el tiempo. Así, continúa siendo una pieza fundamental en la vestimenta masculina, lista para ser utilizada en una variedad de contextos y estilos.
Source: Noah Wire Services